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Relevancia de la certificación en las estrategias de sostenibilidad medioambiental de las empresas

La proliferación de estrategias para impulsar la sostenibilidad medioambiental de sus productos por parte de las empresas hace que siga aumentando en el mercado la presencia de envases y artículos reutilizables destinados a contacto con alimentos. Es importante recordar que los beneficios medioambientales de la reutilización no están garantizados, ya que dependen de la reutilización en la práctica y de un alto índice de retorno. Es por ello que uno de los aspectos más importantes se centra en informar al consumidor de que el artículo que adquiere es reutilizable, así como las instrucciones para su reutilización en caso de ser necesario.

Desde AIMPLAS, Instituto Tecnológico del Plástico, hace más de un año empezamos a trabajar en nuestra marca de certificación que finalmente nos fue concedida el 3/05/2022.

El sello “DESIGNED TO BE REUSABLE – AIMPLAS” garantiza al consumidor que adquiere un producto plástico que este es apto tanto desde el punto de vista de la seguridad alimentaria, como de funcionalidad para ser reutilizado varias veces en contacto con alimentos tras los sucesivos lavados en lavavajillas. El sello contempla los mínimos análisis necesarios que debe cumplir este producto cuando se introduce en el circuito de reutilización por primera vez.

Los fabricantes que deseen certificarse según el sello “DESIGNED TO BE REUSABLE – AIMPLAS” deben someter los productos que quieren certificar a un estudio por etapas realizado en las instalaciones de AIMPLAS, o al menos supervisado por AIMPLAS.

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El estudio comienza con la revisión de los documentos justificativos de las materias primas con las que se fabrica el material plástico y continúa con la verificación de los límites de migración global y específica de las sustancias con restricciones en los simulantes y condiciones de ensayo normalizadas en función de la aplicación real, mediante ensayos de migración global y específica de uso repetido.

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Superada esta etapa, se lleva a cabo una evaluación de riesgos de las sustancias añadidas inintencionadamente (NIAS) a fin de garantizar que su migración al alimento desde el material plástico no representa un peligro para la salud humana.

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Por último, se verifica mediante técnicas de análisis sensorial que los materiales no alteran las características organolépticas de los alimentos en contacto con estos.

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Una vez garantizada la seguridad alimentaria del material plástico para entrar en contacto con alimentos de forma repetida, se evalúa el carácter reutilizable desde el punto de vista de su funcionalidad, a través del ensayo de resistencia a lavavajillas donde debe superar un mínimo de cinco ciclos de lavado.

Superados los ensayos y tras ser evaluados por el comité de calidad, el solicitante deberá asumir el coste del canon para poder hacer uso del sello durante 3 años.

En el siguiente enlace se puede ampliar esta información

El Laboratorio de Food Contact & Packaging de AIMPLAS cuenta con 30 años de experiencia en el sector del plástico en contacto alimentario y con un extenso equipo de especialistas en materiales plásticos en contacto con alimentos que a diario ofrece asesoramiento personalizado a multitud de empresas fabricantes de materiales y artículos destinados a contacto alimentario.

Mamen Moreno Lerma

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