Empack – ¿Crees que encuentros como Empack Madrid ayudan en la concienciación sobre sostenibilidad?

Alex – Una de las cosas más importantes para llegar al objetivo son las alianzas y tener lugares donde existe la oportunidad de conocer a todos los players de la industria durante dos días es el lugar perfecto para crear las alianzas para juntarnos y decir ¿cómo superamos este reto? Porque quizás tengas que aliarte con tu competidor para superar el reto y es maravilloso que Empack proporcione este espacio.

Empack -¿Cómo debemos abordar la reducción del uso y consumo del plástico?

Alex – El plástico es un elemento maravilloso que ha revolucionado la vida del ser humano. Sin el plástico, la medicina no existiría como la conocemos, volveríamos a los años 40, con muchísima menos higiene y sin elementos estériles de calidad necesarios para salvar las vidas de miles.

Ahora, el problema es que hemos concebido unos usos del plástico que quizás no sean los mejores para un elemento que se fotodegrada, dejando partículas durante años en el medio ambiente, generando el impacto que genera a la vida a la biodiversidad y a la vida humana. Entonces, en mi opinión, la clave está en revisar el uso, la mentalidad y la utilidad que le hemos dado a ese elemento.

Empack – Se habla mucho del consumo de proximidad y de temporada, ¿Es realista esta solución en un mundo tan globalizado?

Alex – En mi opinión, no se trata de blanco o negro, la clave no está en la disyuntiva entre consumir todo de todas partes o comprar solo en la tienda de debajo de casa o de la huerta de la abuela, no es una realidad en el mundo que vivimos hoy en día. Lo que está claro es que hoy sí que estamos muy desbalanceados hacia un lado, es decir, en cada supermercado de cada pueblo o ciudad de España, hay mangos que no vienen de aquí, que vienen en avión. ¿Esto realmente es sostenible para el planeta? Quizás haya que reducir el consumo de mango, porque como nos dé a todos los que estamos aquí por comprar por lo menos un mango de supermercado las consecuencias podrían ser devastadoras para intentar satisfacer esa demanda.

Creo que la clave está en encontrar un equilibrio entre las dos cosas, entre qué cosas podemos consumir de forma ocasional, o en pequeñas porciones digamos, que vengan de fuera, y solventar nuestras necesidades básicas con productos locales o de proximidad.

Empack – ¿Deberían potenciar las empresas sus servicios técnicos para que la gente pudiese reparar sus bienes?

Alex – Aquí hay una doble responsabilidad.  La primera, de los fabricantes y de los productores, y es que, hoy en día para conseguir reparar algo es realmente complejo sólo el tratar de encontrar quien puede hacer esta reparación. Además de que, probablemente, todos, o casi todos, los componentes de ese objeto serán desechables y no sirvan para crear otro producto igual. Creo que la industria a nivel producción se ha de replantear todos los componentes los productos que fabrican y ver formas de que sirvan para fabricar otros productos iguales al cabo de un tiempo determinado, porque de otra forma, condenamos a ese producto y sus componentes a tener un único ciclo de vida antes de acabar en la basura.

La segunda es la responsabilidad de los consumidores, que ahora mismo tienen muy arraigada la creencia de que nuevo es sinónimo mejor. Desde nuestra educación se nos enseña que para demostrar nuestro estatus debemos comprarnos el último modelo de la marca de moda. Por eso la gente se agolpa a las colas de los lanzamientos para ser “el primero que…”. Creo que ahí hay una clara necesidad propia de reconocimiento hacia nosotros mismos que estamos solventando a través de consumir lo nuevo.

En mi opinión, debemos trabajar en la parte educacional para que nuestro autoestima, poco a poco, no esté tan relacionado con el consumo. Como comento, creo que es más una conciencia colectiva a la que todavía tenemos que llegar pero veo que ya empieza a asomar en algunos grupos de la sociedad, y es que cada vez más gente se da cuenta de que ya no necesitan prendas de temporada solo porque es la temporada y han llegado las rebajas.

En resumen, para mí la clave reside en esta doble responsabilidad productor – consumidor, porque hasta que ambas partes no se pongan con ello, ninguna de ellas asumirá la responsabilidad completa.

Empack – ¿Crees que podría haber ahí un nicho de mercado?

Alex – Desde luego, esta es una tendencia que se ha desarrollado durante los últimos 5 años y hoy en día existen empresas que han encontrado un claro hueco en el sector arreglando productos para darles una segunda vida. Los ejemplos más claros que se me vienen a la mente son los del sector de la telefonía, ya que, ni una productora, ni un fabricante, ni un operador está dispuesto a arreglar ese producto, ya que para ellos es mucho más rentable que consumamos un producto nuevo.

Creo, definitivamente, que aquí hay un mar de oportunidades para quien sepa verlas y aprovecharlas.

Empack – ¿Algún consejo práctico para una empresa del sector del packaging para reducir la huella de carbono?

Alex – No hay nadie que conozca mejor las necesidades de una empresa que las personas que forman parte de ella.

Entonces, yo invito a las empresas a que hagan una ronda de preguntas o un brainstorming en su siguiente reunión, o en un email a sus equipos preguntándoles precisamente qué medidas piensan que se podrían implantar en la empresa para reducir su impacto en el medio, o cómo hacer los procesos de la empresa más eficientes, por ejemplo, en definitiva, una pregunta abierta, porque quizás ahí con una sola pregunta, en un solo email, haya un montón de respuestas.